¿Dieta para prevenir la depresión?

¿Dieta para prevenir la depresión?

En los últimos años ha crecido la tendencia a llevar a cabo estudios cuyo objetivo es conocer cómo influye la dieta en determinadas enfermedades . Entre las más estudiadas se encuentran aquellas que están relacionadas con la salud mental, como es el caso de la depresión.

De hecho, se cree que la causa no se encuentra en un único factor, sino en la combinación de varios factores de riesgo, entre ellos se encuentran la dieta, el sueño o el ejercicio.

«La respuesta a cómo la dieta puede influir en nuestro estado de ánimo hasta el extremo de ser un motivo para desarrollar depresión o ansiedad, la encontramos en lo que se conoce como sistema nervioso entérico (SNE)», que es la parte del sistema nervioso que se encarga de regular nuestro aparato digestivo y se encuentra en las capas que revisten nuestros órganos digestivos. De ahí la estrecha relación del estado de ánimo con enfermedades como el síndrome de colon irritable o con síntomas como la diarrea, el estreñimiento o la acumulación de gases .

La pregunta es ¿puede una dieta curar la depresión u otras enfermedades del estado de ánimo? No hay evidencias de que una dieta determinada pueda curar la depresión , aunque hay que tener en cuenta que una dieta poco adecuada (igual que una vida sedentaria o un mal hábito de sueño) puede suponer un factor de riesgo para desarrollarla.

Así, el consumo de ácidos grasos trans (comida «basura» o bollería industrial), el bajo consumo de ácidos grasos Omega-3, mantener un patrón de dieta occidental con alto consumo de grasas saturadas y de carnes rojas y procesadas pueden ser factores que influyen en la predisposición a sufrir una depresión.

Las siguientes prácticas alimenticias pueden ayudar a prevenir las enfermedades relacionadas con los estados de ánimo:

  • Seguir patrones de dietas tradicionales, como la dieta mediterránea.
  • Consumir ensaladas.
  • Reducir en el consumo total de carne, recomendando carne blanca en lugar de carne roja o procesada.
  • Preparar salsa casera de tomate, ajo, cebolla y especias con aceite de oliva para aderezar las verduras, pasta, arroz y otros platos.
  • Evitar el consumo de mantequilla, crema, comida rápida, dulces, pasteles y bebidas endulzadas con azúcar.
  • Aumentar el consumo de frutas, verduras, legumbres, cereales enteros, frutos secos y semillas.
  • Tomar alimentos ricos en ácidos grasos poliinsaturados con Omega-3.
  • Evitar procesados y comida rápida, así como exceso de azúcares simples.

 

En resumen, una dieta sana, variada, y balanceada, complementada con buenos probióticos, estimularán tu cuerpo para que sea más saludable; esto, acompañado de actividad física y de un correcto patrón de sueño es beneficioso para poder evitar estos trastornos.